martes, 31 de enero de 2012

OLD IDEAS- LEONARD COHEN


"Everybody knows that Leonard owns the heartbreak beat"CHUCK PROPHET

             "El más básico desarrollo de una melodía, la más trabajada manipulación de la palabra"

Hoy es el gran día, ese que tanto esperaba desde que ese gospel con voz de Dios llamado Show me the place apartó la nube negra o la trajo, quién sabe, Len no conoce de cielos despejados, sabe de gabardinas, de paraguas, de mugre y de vida. El caso es que el tema me produjo un efecto inmediato vip vaporub, todo se ensancha cuando la arruga canta, cuando la sabía arruga canta.
El camino es estrecho y ellos te lo ponen ancho.
No he resistido la tentación y he estado colgado del streaming entrecortado de nrp o del país pero aquí está ya, el cd flamante y todavía con todo por contarnos,  sin fecha de caducidad pero si escuchado. 
Leía por la bloguería que es ese disco ideal para saloncito, calefa a 20 grados y tarde de café + manta y me pareció una imagen que no se corresponde a estas Viejas Ideas: este disco se vive en la calle, se le gasta la suela y si se llega a producir el agujero, se repara, se le ponen philis. 
Hay formas de ver y percibir, cierto que Nick Lowe, el propio Len o el mismo Richard Hawley que no es tan carroza,  para aquellos que no sean yonkis de la palabra musicada,  pueden resultar perfectos para amenizar una merienda o incluso un polvo porque, en una primera capa no molestan, son sofisticados, menos es más , quiet is the new loud, sin embargo , el torbellino emocional que encierran, la expresión en esos cortometrajes que se marcan, fijan el camino a seguir, el comportamiento y la forma de pensar. Es así como los veo, son pura poesía transformadora y la trato de poner en práctica.
Old Ideas no es un disco, es un milagro porque este señor, al que le quedan dos nocheviejas para estrenar el 8 de primero en sus dos numerítos,  sigue repartiendo dicha a diestro y siniestro. 
Es lo que tiene no ser coneja y dosificarse, es lo que supone no creerse ni tan siquiera músico y serlo tanto, es la suerte de tener a un obrero tan ilustrado en  la Torre de la Canción, por lo menos ya con categoria de capataz y pudiendo encargarle cosas ese tosícas de Hank. Y lo mejor de todo: esa bendita estafa de su contable perversa mientras él experimentaba el zen californiano. El robo más amortizado por unos creyentes.
La portada ya hablaba de contenidos, the warmth of the sun, un libro, todo muy orgánico, lo poco orgánico que queda en este Mundo, luces y sombras, sólo falta la botellita de Mahou y una tapa de jamón para sintetizar la tranquilidad de la tercera edad leída y preocupada. Si Street Legal es el momento de decisión , la crisis de los cuarenta en foto, esta es la jodida expresión de la estabilidad de los setentas y subiendo.
Y aunque Len llevaba unos discos en los que experimentaba tanto como Waits , ahora ha decidido sonar tibetano, sonar gospel, sonar tan ancho como los valles con esa voz que ya si que se puede decir que es la voz del trueno en el cañaveral y eso sin fumar.
El muy cabrón sigue siendo sexy, tiene la seda en sus graves, tiene el  binomio ángel-demonio de Marvin Gaye  y su misma obsesión por Dios y el Sexo, por los recovecos y los callejones traseros  de los sentimientos y por la vuelta mediante el acorde mayor de turno a la calle principal. Es tan sumamente complejo que aquel que se atreve a banalizarle , a simplificarle , a encasillarle o a llamarle coñazo...que se pague su caña que yo no le invito.
Por encima del bien y del mal, así me parece que ya está este Señor, fuera de categoría: Mark Lanegan y Nick Cave, dos que gastan su eco de túnel intercontinental, se nos visten de monaguillos y santas pascuas, queda una liturgia perfecta.
Aqui hay un poeta de verso currado y melodía espartana pero más complejo que tú y que yo que ya lo somos bastante. 
Dios ya se lo dice en la espeluznantemente impresionante Going Home: eres un pedazo de vago  bastardo metido en un traje, un mequetrefe con ínfulas de poeta pero no eres nada, sólo un elaborador de la más básica melodía sometido a mi dictado. Pero no os lo creáis Len habla con Len, lo de Dios yo no lo distingo, la percibo como una conversación con uno mismo, exactamente lo que siempre me ha sugerido su cancionero. No he visto nunca a Janis en el Hotel Chelsea, me he visto a mi pensando en eso de  I need you  I don´t need you y en la contradicción desde que suena el despertador por la mañana.
Going Home con ese mellotron casi de gitanos callejeros con la cabra, con el auto-diálogo del viejo rabino  de confesionario de catedral gótica y esos ángeles que le arropan, llevándole en volandas es casi una ascensión a los cielos, supone un dame la mano que nos vamos al paraíso.
Más religioso que la religión, así es mi Cohen, yo le amo...¿vosotros?
Cuando las sisters se arrancan en el estribillo es algo mucho más miguelangeliano que lo que pretenden los Fleet Foxes (porque el artista vaticano sería ahora fan del canadiense) y acabar diciendo , como sólo él sabe , lazy bastard, una lección de humildad y vanidad, de ese punto medio porque eso no se lo cree ni él, todo Len menos un bastardo. Es hijo natural de las canciones antiguas, de Hank y los poetas, de la Europa del Este y el éxodo de su comunidad judia, es descendiente de la Historia de la Civilización Occidental con espíritu oriental, es tanto de la Velvet como de Lefty Frisell, tanto de Brassens como de Camarón, es un producto exquisito de vivir a destajo los privilegios de unas décadas de vino Chateaux Letour y rosas, de casa de cal blanca en Hydra y estancias en Le Marais, el barrio parisino más bello y más Cohen.
Going Home es una de las seis obras de arte  de Old Ideas y tenía que estar en el primer lugar. Te deja K.O.
Amen con su banjo reptante puede pasar por Waits pero, por favor, todavia hay clases, Cohen es demasiado Cohen y sólo copia a His Bobness ( Darkness)  porque es con el único que puede jugar al poker de versos, tres acordes y la verdad.
Este número tan cabaretero y  humeante  en el 3:42 se va a los arrabales de Rumanía, otra vez con la cabra y la trompeta y al gypsy soul de aquella entrada que me desapareció sobre el Recent Songs, mierda, y como si el Doctor Zhivago se retirará tras quedar ciego por la espada incandescente, la estepa rusa dibuja contornos helados en plena Gran Vía de Bilbao y la sorrow que nos viene, tiene ya su banda sonora. El violin presagia tiempos duros, él, Len iba lento y nos trataba de enseñar el ritmo del que habla Prophet en su cita pero nosotros no le hicimos caso, él , Len había sido timado por su bendita contable y había resucitado de la ruina con más de setenta: ¿seremos capaces de semejante hazaña y dejaremos de llorar?
Amen es la segunda obra de arte de Old Ideas. Whiskey de malta con mucho sabor final, mucha madera  noble en la maceración.
Pero es que después viene Show me the Place y aquí, como he venido insistiendo, no hay valoración que quepa, es la Cohen del lote, en el sentido de fuera de la Liga, POM del 2012 y yo quiero  que esto suene siempre que quiera bajarme los humos o verme en pelota picada emocional. ¿Es tan generosa esta gema? Si Jeff Buckley viviera...si Nina Simone, gran versioneadora de Len, la pudieran cantar, si Amy se la llevara al rollo cañalla soulero o incluso el orondo Solomon; o si el genial Zevon la diera su toque enjoy every sandwich...Cito a grandes del cielo porque es a lo que suena Show me the Place. Y en realidad no es más que otra oración sobre la esclavitud del amor, eso que al tanto le pone.
Llega Darkness y el homenaje al sonido Muscle Shoals circa Slow Train ( ¿Do unto others?) y la referencia indirecta al puto desastre que nos rodea y se nos avecina, la oscuridad: expertos europeos para solucionar el paro juvenil español, leo y , me da la risa, me da vergüenza, me da la darkness.
¿Qué se ha hecho hasta ahora, qué se ha hecho nunca? Nada. 
Len con voz de Dios nos recuerda que no queda tiempo y el hammond B3 aparece tan amenazante que dirige toda la canción hasta el delirio. Cuarta obra de arte a compás de blues para escuchar en esa huelga general convocada por el propio presidente del  gobierno.
Anyhow es un recitado con toques monkianos y perversos y aquí si que recuerda a Tom , en aquella joyita de "¿Qué coño hace ese tio en el edificio? Una sugerente intersección para dar paso a la quinta: la vuelta al Songs from a Room, la vieja guitarra española con la sexta bajada de tono, zumbona, te hierve la sangre, él y su spanish guitar: el discurso de Oviedo, la tradición ibérica, la pasión española del santo de Montreal: Crazy to Love You es un clásico  instantáneo con la locura del enamorado como motivo eterno del amor y es que como Bob con Make you feel my love, tienen la bula de componer lo más sencillo ,que en otro parece del montón y convertirlo en oro líquido y gaseoso. Atentos a las dos últimas figuras de guitarra antes del silencio, que paren el Mundo que yo ahí me bajo.
Siguen los rezos, continúan los ángeles en su healing game: Come Healing es casi para comulgar, una canción de misal, ves a los que todavía creen en las canciones y salen al pasillo lateral a recibirlas en sacramento con el respeto que ellas merecen. Otro punto de intersección para llegar a la preciosa Banjo donde el instrumento brilla por su ausencia pero cuya imagen daliniana, flotando en el oscuro e infectado mar nos sugiere lo que nosotros queramos, aquí el trenzado de voces femeninas y esa steel que bien pudiera haber tocado nuestro querido Ryland acaba en un estribillo instrumental New Orleans chant con los vientos ala Randy Newman de morirse de placer.
En todas estas viejas ideas, hay viejos ganchos, melodías simples pero adictivas que se enrocan en tu playlist y no dejan paso al siguiente artista. Banjo es preciosa , insisto y es que su banda , como demostró en Barakaldo, es de lujo. Recemos para que vuelva, recemos, Coco, recemos.
Y todo discurre como un día suave de otoño porque Lullaby entronca con la discreción de Dream Heather o Ten New Songs ( dos cofres por reivindicar) y te dejas querer por el cariño del abuelo y de la brillante melódica. El remate viene con Different Sides cuyo estribillo dice:

Both of us say there are laws to obey
But frankly I don’t like your tone
You want to change the way I make love
I want to leave it alone


Y es que el tío escribe de maravilla,  él no quiere cambiar la manera en que hace el amor y nosotros tampoco como él nos lo haga. Viejas Ideas es la solución a los Viejos Problemas. 
La cuesta de enero, este año continua, no significa que febrero vaya a ir sobre ruedas pero hoy es etapa de avituallamiento y Old Ideas nos hace recuperar la fe aunque existan leyes que obedecer. Lo has conseguido Len, pedazo cabrón embutido en un traje, otra vez has conseguido que ame charlar contigo.



5 comentarios:

  1. Tenemos que darle las gracias por habernos dado esto cuando más lo necesitábamos. Show Me the Place es exactamente eso, sobre todo me veo a Nina haciendo virguerías con ella, porque la canción se deja tocar por sus compañeros más grandes, es así de buena, Len es así de bueno. Y voy a escuchar el disco porque no me aguanto, porque acabas de poner el enlace de Spotify y porque hoy es el día. Ay....un día genial para sacar todas las old ideas de la cabeza y ordenarlas.Amén!!

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  2. Todavía no he escuchado a Len, pero tú lo has vuelto a hacer... me has emocionado.
    ¡Amén!

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  3. vitalista y entusiasta entrada, un gusto leerte, como siempre. Respecto al disco voy por la segunda pasada y me está gustando. Abrazo!

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  4. Ya deje pasar sin felicitarte la cojonuda semblanza de esa señoraza que fue Etta James , gloria bendita para todos los amantes del soul y la verdad de los doce compases y escarnio para todas las vedettes (acertado Manrique)que no estrellas que han usurpado ese lugar destinado a las verdaeramente grandes (cada vez mas claro todo lo que el destino le ha acabado negando a Amy). Por eso tras leerlo , Joserra te digo que me quito el sombrerito gris , luzco mis canas y entradas , esbozo esa media sonrisa que me queda y con voz monocorde de solo verdad y sentimiento,Y te felicito por estas palabras . Buenisimo post Joserra. Un abrazo

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Amo la música más que a todo.

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Todos los textos pertenecen a Joserra Rodrigo salvo citas y párrafos con su autor referenciado.