miércoles, 15 de octubre de 2014

LUCINDA WILLIAMS- DOWN WHERE THE SPIRIT MEETS THE BONE


SHE´S AN ARTIST , SHE DON´T LOOK BACK


Vale, ya sabe todo el mundo que amo a Lucinda sobre todas las cosas pero voy a tratar de valorar su nuevo y gran esfuerzo en su justa medida, en una posición más distante, controlando los nervios, cosa harto difícil tratándose de ella.

Que sea doble, se lo hace fácil a los perezosos (pasarán o dirán que es demasiado largo) y difícil a los valientes e incluso a sus fans incondicionales.Hay que ver lo que recompensa subir tan alta montaña, qué bonita es la vista desde arriba y qué bien sabe el bocadillo.

Tenemos que ser comedidos porque 20 canciones son muchas y la historía de los dobles ilustres del rock and roll ( quizás los mejores cuando dan en la diana) es bien escasa, por lo menos en cuanto a configurar un discurso coherente completo o incoherente pero genial.

Uno no esperaba esto, ni mucho menos. Me refiero a que tras tu encantadora primera época (el homónimo es impresionante y Sweet Old World también), llegó su momento Blonde on Blonde (así llamaron en la etiqueta al Car Wheels On A Gravel Road), luego esa otra POM - apreciacion personal- acerca del desamor y el sur, es decir, su Blood On The  Tracks ( el ya exiliado Essence)  y de ahí , a un disco también soberbio como es el infravalorado World Without Tears(con sus seis primeras canciones realmente extraordinarias) para pasar a acomodarse en algo mucho más previsible, con momentos muy inspirados pero como se dice en inglés americano, not on a roll.

Valoro mucho cosas del West (me gusta parte de su tono), no vuelvo demasiado a Little  Honey aunque tiene perlas y disfruté mucho de Blessed pero ahora, incluso Blessed palidece cuando sale a relucir de nuevo su rabía y rock and roll como pasa en Down Where The Spirit Meets The Bone y además, como en esta ocasión, se junta en el estudio con los músicos adecuados.

Lo más curioso de todo es que su disco en directo, mi favorito, el Live At The Fillmore me parece básico, uno de los mejores live que tengo y que he escuchado; es ahí , sin domesticar, donde me encuentro con su fado salvaje y empiezo a sudar con mi querida Lu.

Lo primero que destaca de éste DWTSMTB, de título tan largo como su minutaje,  es un detalle que no se me puede pasar. Esta colección ha nacido para escucharla en el formato negro, redondo y  con agujero: se debe asimilar por etapas (en ello estamos), sin nervios, por caras y si son 6 , como es el caso (en vinilo es triple), mejor que mejor.

Y asi voy a tratar de analizarlo, si bien debo confesar con caracter previo que tenemos una composición 70% algodón (es decir, Lucinda en crudo, la que mola mucho) y un 30 % acrílico , de ese piñón fijo al que se había abonado desde el West y que le había vuelto un poco en la sombra de lo que fue. Pero , sobre todo, lo más reconfortante es que su voz está totalmente enchufada todo el tiempo y es un primor escucharla hasta balbucear pese a ese manierismo sureño tan suyo inevitable.

Estamos otra vez más, ante la influencia del disco maestro que más ha marcado a la generación post-sixties de songwriters que han llegado a los 50 o 60 años en fechas cercanas al cambio de siglo, el Time Out Of Mind de His Bobness. Ahí se marcó la senda de la arruga bella, de cómo envejecer en un estudio ofreciendo algo diferente a la tradición de la música popular americana, recuperar ecos y profundidades John Fordianas. Daniel Lanois tuvo el todo que ver.

Cara A ( la de los singles)

Compassion

Unos sencillos acordes de acústica, los de Working Class Hero abren este largo viaje. Sobre letras de su padre el poeta Miller Williams, encontramos a la diva de Lake  Charles, con un recogimiento y respeto digno de una fadista del barrio alto, estableciendo las reglas de juego, aquellas del inarticulado discurso del corazón. Llama la atención su tono de oración sobre la compasión y las lecciones que da el enfrentarse a las personas y a la gente chunga, pero nada de malos rollos, compasión is the answer. Qué  buen consejo pero qué difícil de cumplir

Protection

Tras esa intro necesaria y que da pistas sobre que esta vez va en serio, llega ésta maravilla donde te coscas a la primera que aquí hay groove y que el motor está bien engrasado. Suena tanto a Tom Pettty como a Donna Summer y creo que estamos ante su Because The Night. Primer toque: cómo están de guerreras esas guitarras y esta sección de ritmo. Respuesta: sección de ritmo deluxe, está el grandioso attraction Pete Thomas y Davey Faragher, soldados de Costello. Todos firmes! Ellos marcan la diferencia.
Un himno frente a la intromisión del mal dentro de una/o con proclamas tan inocentemente bellas como a protegerse de los enemigos del rock and rol y del soul ( qué bueno, razón lleva) Me encanta escucharla decir cosas así, se las creo.

Burning Bridges

La canción más californiana que haya compuesto la de Luisiana y para la ocasión hace de Lindsay Buckingham, el gran Jonathan Wilson. Se nota su clase en un solo precioso que vuela y lo que le gusta Stevie Nicks a la rubia teñida en su forma de cantar las estrofas. Single claro para una época en la que se vendian y radiaban los 45 rpm. Precisos coros y muy comedidos,  por todo el disco. Hats off  a su chorus girl Gia Ciambotti.

East Side Of Town

Un tremendo escalofrio recore el espinazo con la primera de las canciones denuncia contra ese politico de tres al cuarto que sólo visita el barrio para succionar los votos de la pobre gente y luego olvidarse de ellos hasta que toca de nuevo hacer campaña. Como siempre, ella domina las canciones localizadas en los puntos cardinales geográficos o del corazón y da igual por el que decida escribir, en él estará la verdad. La intervención aquí y en muchísimos temas de Ian McLagan (una leyenda, Faces, you know) le dota de una musculatura y una profundidad a todo de aupa el Erandio. Tremenda e hipnótica gema de su repertorio desde la escucha número uno.

Cara B  (la de las Sombras)

West Memphis

Vuelve la cronista, esa Lucinda que en cuatro brochazos te cuenta la historia a la perfección y para la ocasión y en homenaje a la Meca del R&Roll se trae a la grabación a toda una leyenda, Tony Joe White al que se reconoce de la misma y es entonces cuando vas directo al pantano, amigo.
Un soberbio swamp blues donde la Williams canta como si fuera una gata en celo y te pone a cien , aunque trata de denunciar la condena injusta de tres adolescentes a los que se les acusó de matar y mutilar a unos niños y por lo que los pobres se comieron 18 años pasados de cárcel hasta que salió una evidencia y toda la verdad.

La rabía con la que suelta todo recuerda al Hurricane de su amado Bob Dylan. Antológica, como La Isla Mínima.

Cold Day In Hell

En una onda de desgarro totalmente Essence, llega el primer fado marca de la casa:"antes de que me putees so cabrón, déjame disfrutar de otro día de frio en el infierno"
No hace falta decir más, en este palo ella es la reina y punto. Elegancia.

Foolishness

Necesitamos apartar los fantasmas que nos impiden ir por el camino estable pero la cabeza no tiene botón de stop. Una pieza de estas que cagalban en circulos, ambiciosa, muy Time Out Of Mind, muy Most of The Time. Todo un exorcismo generoso donde la marca del sonido Darkness de Bruce también decide (de hecho, en estas sesiones tan productivas grabó también el The Factory)

Esta cara tiene las propiedades de rebeldía del Desire y la profundidad de los sonidos de la oscuridad en los límites de la ciudad. Me encanta, las guitarras crujen a sus anchas.


Cara C  ( Lu goes back to Country-soul)

Wrong Number

En una onda más Blessed y con acordes más ortodoxos de country, esta preciosa canción juega con la equivocación en la vida como rima sencilla y demuestra que al final ella borda las canciones de cornudas como sus negras adoradas, Doris Duke  y compañía. Me la imagino dentro del I´m a Loser de la última,  con arreglos de Swamp Dogg y me parece algo natural. La Williams no sólo tiene duende, también la discoteca adecuada de soul y de country, las fuentes. Lo que es espectacular es todo lo que puede llegar a transmitir con sus tres acordes y la verdad.

Wrong number, wrong town, wrong hotel, wrong adress.


Stand Right By Each Other

Confesa fan de Dan Penn, aquí no sólo está el más claro de sus homenajes al Dios del country-soul sino una staple para el genero. Preciosérrima y mi favorita de las 20 por una sencilla razón: recuperación de nuestra Lucinda inocente, de esa que lo clava, que suena como cuando tu hermana te cuenta una tonteria y te ries y la quieres.
Además, si el maromo a la que le dirige tan bonita letra no le hace caso es que es muy, muy idiota. Porque el amor en una bicicleta para dos y hay que dar pedales, ya sabemos que jode y cansa pero es la única fórmula de llegar más lejos.


It´s Gonna Rain

Previsible tonada pero no por ello deja de ser encantadora. Escuchar a Jakob Dylan de los Wallflowers en el estribillo es estupendo porque tiene una voz muy muy chula ( y uno se pregunta ¿para cuando con su viejo?)
La nana amorosa del DWTSMTB.



Cara D  (o cómo salir del pozo)

Something Wicked This Way Comes

En todos sus discos tiene que haber un tornado que no deje tabique en pie.
En este blues rock del delta que bebe tanto de sus amados Doors  como, de nuevo, del Time Out Of Mind y de la sombra de Jim Dickinson, la interpretación vocal no es de este mundo. Realmente estamos ante la Mavis Staple del white blues, con ese reverb y vibrato natural y el acento sureño más tórrido y sexy de la parte sur del hemisferio norte.
Mighty wicked, something wicked...no meeeercy, no meeercy, no love, no love.
Vudú rock.Mucho pantano y pasajes de guitarras enamoradas en DWTSMTB.Sudo.

Big Mess

How can you be so casual. ¿No os podeís imaginar como lo pronuncia? Otra vez y quizás esta ves si que haya que tirarle de las orejas por repetitiva en temática y en estilo dentro del mismo disco, estamos ante la kiss off song del anda que te den.
Con aires de nuevo soulerillos, aporta menos al todo pero mantiene el nivelazo.


When I Looked At The World

Recuperación y otra oda para seguir adelante, pese a los contratiempos, pese a que la mala racha ya dura demasiado tiempo. Mira al mundo que aunque es una mierda siempre tiene algo interesante en lo que fijarse.
Es tan bonito el tono de la estrofa y como si de repente se abriera una ventana, aparece su luminososo estribillo.
Cuando llevas tiempo con la mirada gacha pero subes los ojos hacia el cielo,  y hasta lo ves azul y dices, todo es diferente, eso es, the clouds roll away type of song. Una experta en la materia.


Cara E  (o yo soy Neil Young)

Walk On

No solo en el título, esto es puro Shakey. Por mucho que la llamen la nueva Dylan para mi Lucinda es Neil, no porque se parezcan o le copie, cada uno es un universo, sino porque ambos son salvajamente verdaderos, ambos duelen en su perfecta imperfección.
Un country rock sencillo pero alucinante.

Temporary Nature ( Of Any Precious Thing)

Otra vez a misa, a Muscle Shoals o a la Stax. Patrick Warren bordando las notas de piano (tocar con Dylan, Waits, Springsteen o Lamontagne te hace putoamo)
Esto es gospel sobre que en las humildes y pequeñas cosas está la belleza.
Y esa frase robada a su viejo inmensa y fadista de : los más tristes gozos son los más ricos. La cuenta de las pérdidas y ganacias del amor, su eterno leit motiv.


Everything But The Truth

Otra vez groove y rapeado. A veces Lu es tan ZZ Top. No se distingue mucho de West Memphis, esa es la pega pero su rollo Florence, Alabama, recordar las guitarras de Eddie Hinton y sobre todo y en todo el doble, escucharle escupir verdades, es lo que te levanta el ánimo y te lleva al aplauso. Crece, crece y crece y ya puede ser su himno, su título, la frase de su camiseta. Mavis Staple is on the air, de nuevo.Final con coros gospel sobrecogedor,


This Old Heartache

Vuelta al rodeo, al country estricto, al american star´s and bars, al establo, a la steel y a las barras de Honky Tonk. Esta la adoraran aquellos chiitas que consideraron judas a la rubia tras el car Wheels y que la encasillan en una musica que ama tanto a lo que más quiere, el rock and roll.
Lucinda tiene que ver más con Chrissy Hynde que con Emmylou pero no hay manera de que un sector se entere.



Cara F (Un poco de todo)


Stowaway To Your Heart

Una de las más neilyoungeras. Gozada absoluta..Junto a East Side Of Town, Stand Right By Each Other, en mi podium.
Te dan unas ganas de bajarte a Andalucia en el coche, escapando de este primer día de lluvía en siglos en el Norte. Luminosa carretera, como la del Zuma de...Crunchy guitars, coros, maravilla maravillosa y repetimos todos I´m a stowaway to your heart.
Polizona eres de mi corazón, Lucinda, forever.

One More Day

Vientos para otra soul ballad (hay demasiadas y lo dice un fanático de ellas) que bien pudiera haber firmado Van The Man u Otis Redding.
Cierta sensación de ya escuchada por su ortodoxa confección, aporta sólo emoción, lo cual no es poco. Lo mejor sus arreglos de metal.

Magnolia

Hacer suya una obra maestra de nuestro llorado Joao Gilberto de Tulsa, es decir J J Cale sólo lo pudo hacer Nina Simone y muy pocas chicas más.
Sin embargo, me tomo esta versión , que sobrepasa los diez minutos como el Highlands en TOOM, cumple su función de después del vértigo y cambio de 19 canciones previas:, un rato de meditación , de relajación, de reflexión, que tan bien nos viene a todos. Bill Frizell  y Greg Leisz shine! ( cómo están en todo el disco, esenciales)
Y así , como casi siempre en sus trabajos, en tono hipnósis, acaba un disco que merece un viaje por carretera completo para apreciarlo y valorarlo como merece. y que intuyo irá creciendo con el tiempo su valor.

Conclusión:

He tratado de distanciarme pero creo que no lo he conseguido. Este doble ha venido para quedarse y, en mi opinión, es su mejor colección de canciones desde el World Without Tears. Ella canta como nunca, suena acompañada por músicos en estado de gracia, encontró su estilo, es un estilo en si misma y no va a volver a hacer un Drunken Angel porque no le da la gana y yo le aplaudo por ello.
Ya hizo su Blonde On Blonde, su Blood On The Tracks, ahora le ha llegado el turno a su Time Out Of Mind.

She´s got everything she needs, she´s an artist , she don´t look back

Allá donde el espíritu se siente en los huesos, allá es donde estará siempre Lucinda.


Esta entrada se publicó en el Exile SH Magazine pero, en realidad, como dice Lou, pertenece a la Land. Bringing it all back home.


2 comentarios:

  1. Entradón que disfrutamos en exclusiva en el Exilio donde se ama a Lucinda sobre todas las cosas. Amén. Pero sí, la entrada es 100% de la Land, y por eso nos gusta. Passion is no ordinary word.

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  2. He disfrutado muchísimo de este disco desde su primera escucha y sin embargo tengo la sensación de que aún no le he dado las escuchas suficientes para apreciar todo lo que ofrece. Creo que no es el mejor disco de Lucinda y sin embargo creo que es un regalo maravilloso para todos los que la amamos; siento... me da esa sensación y no sé realmente por qué, siento que en este disco Lucinda se muestra ante nosotros tal cual es, con total sinceridad, relajada y disfrutando de mostrarnos la música que le gusta hacer y escuchar... y creo que eso es lo que me cautiva y hace que no pueda dejar de querer escucharlo una y otra vez... siempre con la sensación de que descubriré algo más acerca de ella (y no se me ocurre mejor motivación)... Por eso creo también que ninguna canción está de más... Es cierto que desde el primer instante llama la atención el sonido, la producción, y aun sin saber mucho como es mi caso, uno se percata de los musicazos de los que se ha rodeado, del nivelazo que hay ahí..., pero sin embargo todo eso empalidece y queda en un segundo plano frente a esa maravillosa sensación que transmite la propia Lucinda, creo que ahí está la verdadera magia de este trabajo.
    Por cierto, coincidimos en el podio, aunque la canción que yo no me he podido quitar de la cabeza desde la primera escucha es "Walk On"... walk on, Lucinda, walk on...
    Un abrazo

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Amo la música más que a todo.

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Todos los textos pertenecen a Joserra Rodrigo salvo citas y párrafos con su autor referenciado.